Cuando leo lo de la huelga en Quintanar de la Orden por no querer atender a los embarazos de bajo riesgo , no puedo salir de mi asombro y a la vez me embarga la pena por compartir el mismo título profesional con compañeros que dejan de atender parcelas que jamás debería haber abandonado la A. Primaria y que con ello alientan una actitud que , de prosperar, acabará definitivamente, con el prestigio que le quede a nuestra especialidad.
Además , el argumento que da el representante de los citados compañeros, es de una endeblez que raya en lo surrealista: que ya existe la obstetricia que se encarga del embarazo. ¡Toma del frasco carrasco! Y también existen Urólogos para ver las próstatas, Otorrinos para ver los oidos y la faringe, Digestólogos para todos los sintomas relacionados con el tubo digestivo (dispepsias, ulcus , colon irritable, hemorroides, ...) , Neumólogos para que vean a todos los EPOC y neumonias comunitarias (¡anda , si no hay neumólogos fuera del hospital! ¿quién se encargará de ver a estos pacientes que tienen la ocurrencia de tener una neumonía fuera del hospital?), Cardiólogos que tendrían que ver todos los pacientes cardiópatas que tienen el deseo de vivir su vida fuera del Hospital aunque hayan sido diagnosticados de Angor, Infarto de miocardio ó insuficiencia cardiaca y estén estables...., Reumatólogos que también deberían , según los compañeros de Quintanar, ver a todos los pacientes con artrosis, tendinitis de hombro, gota, artritis reumatoide.....En fín no sigo porque me va a dar un trastorno de ansiedad y tendría que ir a un Psiquiatra si viviera en Quintanar.
Lo peor , es que esta forma de pensar está bastante extendida entre algunos médicos que se llaman de atención primaria, y que con esa actitud están cediendo parcelas de poder a la Atención Hospitalaria , que van a ser muy difícilmente recuperables, a la vez que le dan argumentos a los políticos para pensar que los que resuelven problemas son los médicos hospitalarios y por lo tanto las inversiones económicas tan profundamente dispares entre la Primaria y la Hospitalaria tenderán a crecer. Y luego vendrán los mismos a quejarse de que están mal pagados , que no se les hace caso, que si están todo el día haciendo papeles....
Y ya el colmo es que utilicen a la pobre población que está bajo su atención médica primaria, para que les apoyen en dicha reivindicación. Es como si los usuarios del metro de Madrid se manifestaran conjuntamente con los del servicio de limpiezas , tras padecer la montaña de desperdicios , basura y olores que dichos trabajadores les están obligando a sufrir , incluso con algunos piquetes que tiran basura en las estaciones. Espero que haya algún bienpensante que les haga desistir de dicho apoyo y que estos compañeros se den cuenta de su despropósito para con su población particular y para la Atención Primaria en general.
En Porzuna llevamos veinticinco años atendiendo a los embarazos de bajo riesgo y nuestra experiencia es muy satisfactoria así como la de nuestras pacientes que agradecen que su medico también les atienda en dicha situación. Creemos y defendemos que la A. Primaria debería controlar el embarazo de bajo riesgo y clasificar a las de medio y alto riesgo para que sean atendidas por los ginecólogos. Lo mismo que creemos que deberiamos controlar y acompañar al paciente en situacion terminal , hacer las guardias que nos correspondan, cuidar y controlar el 90% de los problemas que se plantean cada día en consulta, hacer atención biopsicosocial e implicarnos en la atención de nuestros pacientes que tienen el coraje de depositar su confianza en nosotros y hacernos depositarios incluso de confidencias en el terreno de lo afectivo e incluso espiritual. Así la población nos consideraría cada vez más necesarios y podríamos exigir a los políticos que dejaran de discriminarnos con respecto a la mal llamada atención "especializada". Y cumpliriamos con las funciones para las que la especialidad fué creada y que tiene sus raices en el médico de cabecera de toda la vida , que igual atendía partos que inmovilizaba fracturas ó reducía luxaciones de miembros etc.
Por lo tanto no seré yo quién secunde la iniciativa de Quintanar y en la medida de mis posibilidades seguiré defendiendo justamente la postura contraria. También creo que somos muchos los que creemos en esta forma de entender la profesión.Feliz Navidad