Ella está en el horizonte. Me acerco dos pasos, ella se aleja dos pasos. Camino diez pasos y el horizonte se corre diez pasos más allá. Por mucho que yo camine, nunca la alcanzaré. ¿Para qué sirve la utopía? Para eso sirve: para caminar. (Ventana sobre la Utopia. Eduardo Galeano.
CREO EN LA UTOPIA PORQUE LA REALIDAD ME PARECE IMPOSIBLE
- Para comenzar la semana con una sonrisa , os dejo una factura de un profesional de los de antes, cuando se cobraba en pesetas . El tal Hipólito era un figura que igual valía para un roto que para un descosido. Vean , vean: