- Seguramente, muchos no habreis oído hablar de Tommy Douglas. Si lo buscais en la Wikipedia , os dareis cuenta que éste pequeño "gigante de la pradera" fué uno de los responsables de la creación de los Sistemas Nacionales de Asistencia Sanitaria, incluidos Medicare y Medicaid.
Aunque era escocés de nacimiento , lo más importante de su vida transcurrió en Canadá y en 2004 fué votado como el "canadiense más grande de todos los tiempos".
Pues bién, Tommy Douglas, realizó un discurso explicando el problema que tienen los países a la hora de ser gobernados. En ese mundo llamado "Mouseland",
en el cual puede reflejarse cualquier país, nos quedará claro que al
final, la culpa de ser gobernados por personas que no se preocupan por
los intereses de la sociedad y del pueblo, no es de los propios
gobernantes, sino de los propios ciudadanos que son los que eligen a los
gobernantes.
Me encanta esta reflexión suya:
«La medida del valor de un gobierno no es solamente el Producto Nacional Bruto, tampoco el equilibro de la balanza internacional de pagos, no está solamente en la cantidad de reservas de oro.
Seguramente el valor de un gobierno está en lo que hace por su gente,
la medida en que mejora su calidad de vida, mejora la asistencia
sanitaria, les da mejores medidas de seguridad, mejores estándares de
valores morales. Eso es lo que hace grande a una nación».
Este hombre tiene un discurso, una fábula política que no os podeis perder , los que no la conozcais, y que es de rabiosa actualidad en los tiempos que nos ha tocado vivir.
La Utopía
Ella está en el horizonte. Me acerco dos pasos, ella se aleja dos pasos.
Camino diez pasos y el horizonte se corre diez pasos más allá. Por mucho que yo camine, nunca la alcanzaré.
¿Para qué sirve la utopía?
Para eso sirve: para caminar.
(Ventana sobre la Utopia. Eduardo Galeano.
CREO EN LA UTOPIA PORQUE LA REALIDAD ME PARECE IMPOSIBLE
Camino diez pasos y el horizonte se corre diez pasos más allá. Por mucho que yo camine, nunca la alcanzaré.
¿Para qué sirve la utopía?
Para eso sirve: para caminar.
(Ventana sobre la Utopia. Eduardo Galeano.
CREO EN LA UTOPIA PORQUE LA REALIDAD ME PARECE IMPOSIBLE