- Ya hace algo más de un mes que me llamaron dos de los mejores residentes de Medicina de Familia que hemos tenido en nuestro Centro de Salud, para decirme que iban a empezar de nuevo el MIR, uno de llos en Medicina Preventiva y Salud Pública y el otro en Análisis Clínicos. Es decir , dos buenos especialistas en atender a personas , en entrevistarse con ellas con buena comunicación , en compartir emociones, en empatizar con sus preocupaciones.......... se cambian a especializarse en áreas en las que no van a tener que ver pacientes como los vemos en las consultas. ¿Qué ha pasado? Pués sencillamente que se han hartado del maltrato continuado en forma de contratos de dos días aquí y uno allí, de tener consultas masificadas de hasta 60 -70 pacientes al día sin respiro y sin poder aplicar lo aprendido ,con tanto esfuerzo, en la residencia; de no tener expectativas de acceder a una plaza hasta que no pasen tropecientos años gracias a que las ofertas públicas de empleo favorecen a los más "viejos" aunque sean más torpes e incompetentes gracias a los acuerdos administración -sindicatos (que dicen defender a los trabajadores pero que practican el "café para todos" y el igualar pero "por debajo" en las competencias)........
YA VA SIENDO HORA , ANTES DE QUE SEA DEMASIADO TARDE DE QUE ESTA SANGRÍA DE PROFESIONALES COMPETENTES SE TERMINE. Lo peor es que está pasando en todas las profesiones y empleos y como dice el cartel de más abajo, las salidas que están dejando no son , precisamente, halagüeñas para nuestros jóvenes especialistas y profesionales:
La Utopía
Ella está en el horizonte. Me acerco dos pasos, ella se aleja dos pasos.
Camino diez pasos y el horizonte se corre diez pasos más allá. Por mucho que yo camine, nunca la alcanzaré.
¿Para qué sirve la utopía?
Para eso sirve: para caminar.
(Ventana sobre la Utopia. Eduardo Galeano.
CREO EN LA UTOPIA PORQUE LA REALIDAD ME PARECE IMPOSIBLE
Camino diez pasos y el horizonte se corre diez pasos más allá. Por mucho que yo camine, nunca la alcanzaré.
¿Para qué sirve la utopía?
Para eso sirve: para caminar.
(Ventana sobre la Utopia. Eduardo Galeano.
CREO EN LA UTOPIA PORQUE LA REALIDAD ME PARECE IMPOSIBLE