La Utopía

Ella está en el horizonte. Me acerco dos pasos, ella se aleja dos pasos.
Camino diez pasos y el horizonte se corre diez pasos más allá. Por mucho que yo camine, nunca la alcanzaré.

¿Para qué sirve la utopía?
Para eso sirve: para caminar
.
(Ventana sobre la Utopia. Eduardo Galeano.

CREO EN LA UTOPIA PORQUE LA REALIDAD ME PARECE IMPOSIBLE

martes, 8 de julio de 2008

Arbitrariedades

Me cuentan que en una reunión de responsables de unidades docentes se anunciaron algunos cambios en la próxima convocatoria MIR que me parecen relevantes.

Lo más importante es que, al parecer a partir de la próxima convocatoria, se va a exigir renunciar previamente a la plaza de la especialidad que se está cursando en el momento de la inscripción para hacer el examen, de tal manera que el que quiera cambiar de especialidad tendrá que asumir el riesgo de perder la que tiene y el de estar varios meses sin trabajar (y sin cobrar). Por lo visto hay gente preocupada porque está habiendo muchos cambios y hay servicios que se quejan, y también porque la gente huye de ciertas especialidades y las abandona si puede.

Esto me parece una barbaridad. Primero porque es un agravio comparativo tremendo con otras generaciones de médicos que sí pudieron cambiar o trasladarse de hospital con más facilidad (quizá esto lo hicieron algunos de los que han decicido esta medida). Segundo porque supone cerrar la puerta a compañeros que ya lo han tenido muy dificil desde la selectividad, para que busquen la especialidad que más les atraiga o en la que se sientan más cómodos o en la ciudad que más les guste o en la que han conocido a la persona que les gusta. Muchas veces no es fácil conseguir esto a la primera, ni siquiera a la segunda. Y es razonable que pueda conseguirse estudiando y presentándose al año siguiente o cuando se quiera mientras se cursa otra especialidad alternativa. No se hace daño a nadie, es enriquecedor desde el punto de vista profesional y el trastorno para los servicios es un problema menor.

También, al parecer, se va pedir una nota mínima para aprobar y tener plaza de residente. Esto, en un primer momento, puede parecer razonable. Puede parecer injusto que ahora sea tan fácil hacer una especialidad cuando antes estaba tan dificil. Pero si se piensa bien también es irracional. Sobre todo porque faltan médicos en este país y, con título o no, esos médicos con notas bajas van a ser contratados sin formar y van a atender pacientes. Creo que si hay plazas, aunque hayan hecho un mal examen, hay que dejarlos que aprendan y formarlos bien, en eso es en lo que habría que esmerarse. Eso es bueno para la sociedad, para ellos y para el prestigio de todos. A todos debía interesarnos mejorar la formación de los que en principio lo puedan estar menos , sobre todo cuando hay recursos para hacerlo.

Nuestra profesión en este pais se está convirtiendo en una carrera de obstáculos larga, arbitraria y antipática, que acaba con el mejor de los entusiasmos. Uno no sabe quien decide ciertas medidas, no lee ningún razonamiento para justificarlas, no puede intervenir en ningún caso en el debate con argumentos. Solo las sufre. Y lo peor es que casi nadie se rebela. Estamos resignados.

Sin embargo creo que si estas medidas se van a poner de verdad en marcha habría que rebelarse, utilizar la red u otros medios para intentar revertirlas. Nos va en ello literalmente el futuro y la felicidad de muchas vidas. Creemos una marea que diga que no.