La Utopía

Ella está en el horizonte. Me acerco dos pasos, ella se aleja dos pasos.
Camino diez pasos y el horizonte se corre diez pasos más allá. Por mucho que yo camine, nunca la alcanzaré.

¿Para qué sirve la utopía?
Para eso sirve: para caminar
.
(Ventana sobre la Utopia. Eduardo Galeano.

CREO EN LA UTOPIA PORQUE LA REALIDAD ME PARECE IMPOSIBLE

sábado, 22 de agosto de 2009

El Síndrome de las Mujeres que Aman Demasiado




Como ahora uno de los libros de moda es el de Stieg Larson de "Los hombres que no amaban a las mujeres", me ha llamado la atención en una publicación de Psiquiatría, el llamado Síndrome de las mujeres que aman demasiado. También se publica en una de las páginas de un diario conocido.

¿Otra secuela de la famosa Trilogía? . En absoluto.


Las mujeres con el “Síndrome de las Mujeres que Aman Demasiado” sufren una falta de autonomía emocional derivada de su inseguridad y una enorme necesidad de ser amadas, dice el titular.




Según la teoría de la terapeuta norteamericana Robin Norwood, que fue quien ideó el llamado HYR (Síndrome de las Mujeres que Aman Demasiado), este síndrome está constituido por un conjunto de ideas, sentimientos y comportamientos que conforman un patrón emocional elaborado en la infancia y que se ha hecho inconsciente. Las mujeres con este patrón emocional sufren una falta de autonomía emocional derivada de su inseguridad y una enorme necesidad de ser amadas. Además es algo que afecta a todo tipo de féminas, sin distinción social, profesional o ideológica.


Una asociación femenina de Ibiza, autodenominada 'Mujeres que aman demasiado' pretende alertar a las ciudadanas de la Isla de los peligros que supone querer a otra persona cuando este concepto "significa sufrir".
"Son mujeres 10" dice su presidenta, con recursos, inteligentes, competentes y tienen éxito en su vida profesional. Pero tienen una debilidad, los hombres problemáticos "a los que creen que pueden ayudar y cambiar" porque se sienten " que son capaces de todo". Una vez dentro de la relación la cosa cambia, ya este tipo de mujeres se ven atraídas hacia relaciones de pareja destructivas, que funcionan como una adicción.

Creo que todos conocemos a algunas mujeres que pueden ser encuadradas en éste síndrome, que llaman nuestra atención porque parece que cuanto peor son tratadas, más se empecinan en seguir con esa relación. Parece que quedan enganchadas a "cuanto peor,mejor". Y somos incapaces de orientarlas y ayudarlas porque carecemos de información y formación sobre las causas psicológicas que subyacen en éstas mujeres , que por lo general son brillantes en muchas otras cosas y ámbitos.

Icíar Bollaín retrató a una de ellas magníficamente en su película "Te doy mis Ojos".
En su libro “Las mujeres que aman demasiado ” Robin Norwood nos dice que :

- Cuando estar enamorada significa sufrir, estamos amando demasiado.

- Cuando la mayoría de nuestras conversaciones son acerca de él , de sus problemas, sus ideas, sus sentimientos y cuando casi todas nuestras frases comienzan con “él..” estamos amando demasiado.

- Cuando disculpamos su mal humor, su mal carácter, su indiferencia o sus desaires como problemas debidos a una niñez infeliz y tratamos de convertirnos en su psicoterapeuta , estamos amando demasiado.

- Cuando no nos gustan muchas de sus conductas valores y características básicas, pero las soportamos con la idea de que, si tan solo fuéramos lo suficientemente atractivas y cariñosas, el querría cambiar por nosotras, estamos amando demasiado.

- Cuando nuestra relación perjudica nuestro bienestar emocional e incluso, quizá, nuestra salud e integridad física, sin duda estamos amando demasiado.
¿Y tú , conoces a alguién así? ¿Crees que es normal sufrir "por amor"? Me parece interesante tener algunas de estas ideas claras para intentar ayudar a quienes aman "demasié".