La Utopía

Ella está en el horizonte. Me acerco dos pasos, ella se aleja dos pasos.
Camino diez pasos y el horizonte se corre diez pasos más allá. Por mucho que yo camine, nunca la alcanzaré.

¿Para qué sirve la utopía?
Para eso sirve: para caminar
.
(Ventana sobre la Utopia. Eduardo Galeano.

CREO EN LA UTOPIA PORQUE LA REALIDAD ME PARECE IMPOSIBLE

jueves, 8 de abril de 2010

Palos de ciego


-Si la organización sanitaria española fuera coherente e inteligente, podría ir dando pasos en dirección a la mejora en los servicios sanitarios que tan caros nos cuestan a todos. Sin embargo da la sensación, yo tengo casi la certeza, de que esto es una organización de sentido único donde no se puede regresar hacia donde un día ,ya lejano, comenzó a desviarse de sus propósitos y fines. Me explicaré:

- La Atención Primaria sigue siendo el ámbito profesional menos preferido por las nuevas generaciones de médicos, merced a su deterioro progresivo como consecuencia de los males crónicos que la aquejan y la escasez presupuestaria, los políticos siguen apostando por gastar cada vez más en la Atención Hospitalaria y menos en la que resuelve ó debería resolver el 90 % de los problemas de salud de la sociedad.
- Se obliga a la A. Primaria a que se atienda a todo aquel que solicite cita en el mismo día , es decir con demora cero, mientras se toleran citas con especialistas de hasta 3 y 4 meses , aunque lleven la etiqueta de preferentes, una vez filtrados por los médicos de cabecera. Como "premio" a estos especialistas que generan estas listas de espera monstruosas, se les conceden las llamadas "peonadas" para que los políticos presuman de que han aligerado dichas listas de espera y los mencionados especialistas cobren un pastón por atender a los pacientes que deberían haber visto en su jornada normal. Paradójicamente , estas peonadas les están vedadas a los especialistas de A. primaria no se sabe porqué, siendo como dicen "el eje del sistema sanitario". Con lo que aumenta cada día el número de médicos de Primaria "quemados" y que derivan demasiados pacientes al Hospital y así se cierra el círculo vicioso que muchos se empeñan en perpetuar aunque esto sea pan para hoy y hambre para mañana.
- Para que exista demora cero en A. primaria , los cupos de pacientes no deberían sobrepasar los 1200 pacientes por médico, lo que implicaría aumentar las plantillas en A. Primaria a prácticamente el doble de las actuales, para cumplir dicha proporción y mantener una presión asistencial que no sobrepase los 25-30 pacientes /día, lo que implicaría una media de unos diez minutos por paciente que permitiese hacer una atención centrada en el paciente, hacer una buena anamnesis y exploración clínica, negociar el tratamiento cuando el paciente expresara reticencias y reflejar dichos datos en su historia clínica. Ver el excelente artículo de El Gerente Demediado titulado "Cuestión de tiempo", para ver las diferencias abismales que nos separan de ingleses , alemanes e incluso americanos.
- Dicha presión asistencial de no más de 25-30 pacientes /día , permitiría también hacer una adecuada Atención Domiciliaria, a aquellos enfermos que están inmovilizados en sus domicilios y que ahora reciben una atención voluntarista , pero siempre precaria y apresurada . Lo mismo diríamos del tiempo dedicado a la docencia y a la investigación que actualmente son anecdóticos en muchos centros de salud de la geografia patria.
- Una de las cosas más lamentables , que demasiadas veces tenemos que oir de nuestros directivos, es que "nos organizamos mal la consulta", "que gestionamos mal el tiempo".... y sandeces por el estilo, que sólo vienen a cubrir su incapacidad para coger el toro por los cuernos y reclamar reformas imaginativas y audaces, mientras muchos buenos profesionales, se queman en las consultas cada día , abrumados por presiones asistenciales de 80-90 pacientes /día. Estos son los gerentes que agradan a los políticos" que toman las decisiones arriba" porque no les crean problemas que solventar y pueden estar más tiempo en sus poltronas haciendo ruido con grandes proclamas sobre la salud pero pocas nueces para hacer cambios verdaderamente eficaces.
- Los médicos de A. Primaria resolutivos y verdaderamente implicados con sus pacientes y su profesión son penalizados una y otra vez ahogando sus expectativas en la marea asistencial, mientras esperan decisiones que nunca llegan en el sentido de que disminuyan la burocracia, mejoren el entorno del ejercicio profesional , su capacidad resolutiva polivalente y su prestigio profesional.

- Y por si esto fuera poco, el plan de austeridad se aplica también a cerrar centros de salud ,los fines de semana. Lo que hace pensar que ó se están equivocando ahora ó se estaba dilapidando el dinero hasta el momento por una mala planificación. En cualquier caso da pié a pensar que en caso de crisis económica , el tijeretazo que se lo lleve la A. Primaria............................ pués nada, majetes a seguir mareando la perdiz y dando palos de ciego.

2 comentarios:

José Manuel Brea dijo...

En mi último post presento un diálogo con un responsable de la organización asistencial…

http://medymel.blogspot.com/2010/04/dialogos-politico-sanitarios-3.html

… y hace tiempo expresé mi visión del caos organizativo como “Disonancias sanitarias”:
http://medymel.blogspot.com/2009/05/disonancias-sanitarias.html

No consigo vislumbrar ningún cambio suficientemente inteligente, y para colmo en este tiempo de escasez presupuestaria la estrategia sigue siendo la habitual: recortar gasto en el capítulo de personal (capítulo 1º), y particularmente de primaria, que ha de continuar haciéndolo todo por el mismo precio. De ningún modo los políticos que estamos sufriendo se plantean recortar gastos suntuarios, eliminar mandos inútiles o, si me apuras, devolver trasferencias onerosas. Y nosotros, médicos de primera línea, tan abnegados en nuestro afán de servicio, seguimos tragando ruedas de molino. ¿Somos santos o g…? ¿Hemos de conformarnos con medallas virtuales? ¿Debemos dejar que sigan (mareando la perdiz) mareándonos y (dando palos de ciego) apaleándonos?

Un saludo.

Antonio R. dijo...

Realmente estoy convencido de que un porcentaje no despreciable de responsabilidad en nuestros crónicos problemas lo tenemos nosotros que , como decía W. Wallace en Braveheart , no nos ponemos de acuerdo ni en el color de la m..
No sólo no vislumbramos cambios inteligentes sino que los que vemos van en la dirección contraria. Si no hablamos alto y claro dejaremos pasar de nuevo el tren del futuro. UN saludo