La Utopía

Ella está en el horizonte. Me acerco dos pasos, ella se aleja dos pasos.
Camino diez pasos y el horizonte se corre diez pasos más allá. Por mucho que yo camine, nunca la alcanzaré.

¿Para qué sirve la utopía?
Para eso sirve: para caminar
.
(Ventana sobre la Utopia. Eduardo Galeano.

CREO EN LA UTOPIA PORQUE LA REALIDAD ME PARECE IMPOSIBLE

domingo, 5 de febrero de 2012

¿DEBEMOS TOCAR A LOS PACIENTES?

- La medicina moderna está en peligro de perder una herramienta poderosa y antigua: el contacto humano. El escritor y médico Abraham Verghese describe nuestro extraño y nuevo mundo en el que los pacientes se han convertido en simples datos y llama a regresar al examen médico tradicional cara a cara. Tan sólo el rito de tocar a los pacientes para explorarlos hace que el paciente se sienta valorado como ser humano que sufre y es escuchado por otros ser humano en quien confía. La mano, como la mirada ó como la palabra son la más alta tecnología que el médico ha tenido y tendrá jamás. No soy enemigo de la tecnología actual : ecógrafos, TAC, RMN.... es más necesitamos su apoyo para ser más eficaces en la ayuda a los pacientes, pero éstas máquinas no pueden NUNCA sustituir al contacto humano. Este vídeo es para no olvidar:


sábado, 4 de febrero de 2012

¿HAY QUE TEMER EL COPAGO?

- En un próximo número de Gaceta Sanitaria se va a publicar el informe SESPAS y otros artículos entre los que se incluye éste relacionado con el famoso  Copago  de Marisol Rodriguez y Jaume Puig , y habla de porqué   no hay que tenerle miedo. Os transcribo alguna de las ideas que vierte , que  me parecen de lo más interesante. Y mucho más , ahora que parece que la crisis de la Sanidad tengamos que pagarla sólo los médicos y sanitarios en general. Ya va siendo hora de que los políticos impliquen a la población  en el mejor uso de los recursos disponibles y no sólo esquilmen  nuestro  bolsillo .
Aquí os presento parte de este artículo y sus conclusiones:




 Se entiende por copago la participación del usuario en el coste de un servicio; en este caso, un servicio sanitario. Dicha participación puede tener la forma de franquicia, un montante fijo o un determinado porcentaje del precio del servicio. El debate sobre la conveniencia y la oportunidad de los copagos no es nuevo.
. La novedad es que, impulsado por la crisis económica, el debate ha trascendido los foros y revistas especializados, y ha llegado a la sociedad. Sin embargo, mientras en la sociedad la percepción
generalizada es que el copago «acabará cayendo por su propio peso», los políticos de uno y otro color siguen proclamando, como hace años, que nunca lo implantarán. Falta de olfato, exceso de miedo, o falso paternalismo preelectoral.
Los copagos responden a una tensión entre responsabilidad social (fiscalidad general) y responsabilidad individual (copagos). Es bien conocido que cuando algo está plenamente asegurado, los individuos tendemos a mostrar menos cuidado en conservarlo y cuidarlo. Además, como «ya hemos pagado» y nos cuesta cero en el momento de consumo, tendemos a sobreconsumirlo. Puesto que pagamos cero (aunque su coste, evidentemente, no es cero), lo utilizamos hasta que el beneficio que obtenemos también es cero. Por consiguiente, los seguros sanitarios, tanto públicos como privados, tienen un problema de eficiencia porque incentivan un uso excesivo de la atención sanitaria, entendiendo por «excesivo» todo aquel
consumo cuyo beneficio es inferior a su coste.
 El consumo excesivo genera más gasto, lo cual conduce a un incremento de primas, en el caso de los seguros privados, y a la necesidad de más ingresos (impuestos, cotizaciones, tasas, etc.) en el caso de los sistemas públicos.
Por lo tanto, el objetivo de los copagos es triple:
  1.      -moderar el consumo de servicios sanitarios, corresponsabilizando a los ciudadanos; 
  2.     - conseguir que los servicios que se dejan de consumir sean los de menos valor para no afectar a la salud;
  3.     - y  en ocasiones, servir de fuente adicional de financiación de la sanidad. Mal aplicados, sin embargo, tienen problemas. Si no se establecen límites o techos máximos, pueden constituir un «impuesto» sobre los más enfermos.



     Si no se vinculan al nivel de renta (pudiendo llegar a la exención), la carga del copago acaba siendo mucho mayor, en términos relativos, en el caso de los pobres que en el de los ricos. Si se establecen de manera uniforme, sin tener en cuenta la efectividad del servicio o tratamiento, dejan al paciente la difícil decisión de discriminar entre lo de más valor y lo de menos valor. Si afectan sólo a un tipo de bienes o a un nivel asistencial, se corre el riesgo de que se produzcan desviaciones del consumo hacia aquellos bienes o niveles
no afectados, y el coste termine por ser mayor.

Si no se protege a los pobres y los más enfermos, puede haber un efecto de compensación y llegar a generar más gasto del que se ahorra debido al empeoramiento de la salud de los enfermos más graves . Por eso, el debate sobre el copago no debe plantearse como una disyuntiva extrema  entre el sí y el no.
Experiencia internacional
En nueve de los 15 países de la Unión Europea existen copagos para todos los tipos de servicios: visitas médicas, hospitalizaciones, farmacia, atención dental y otros servicios, como urgencias, pruebas
diagnósticas, transporte sanitario, prótesis, etc. De estos nueve países, siete tienen un sistema de salud que responde al modelo de seguridad social (modelo Bismark) y dos son países nórdicos (Finlandia y Suecia) con un sistema nacional de salud tipo Beveridge.
Los sistemas de seguridad social suelen tener un grado de cobertura mayor, estipulada y delimitada explícitamente, con gran nivel de elección y muchos copagos. En los sistemas nacionales de salud del norte de Europa la cobertura suele ser, asimismo, amplia, pero también se pagan más impuestos y hay bastantes copagos, aunque limitados en cuantía y normalmente vinculados al nivel de renta. En ningún país se equipara acceso universal con gratuidad absoluta en el momento de utilizar los servicios. En los sistemas sanitarios del sur de Europa hay menos copagos, pero hay más prestaciones no cubiertas por el sistema público, lo cual da lugar a más gasto privado, vía pagos directos o por la compra de seguros privados suplementarios.

Recomendaciones
En definitiva, recomendaríamos:
        1) Modificar el diseño del copago farmacéutico, eliminando la arbitraria distinción entre activos y pensionistas, e incluir los medicamentos hospitalarios de dispensación ambulatoria.
        2) Introducir un copago fijo en las visitas y en las urgencias.
        3) Introducir tasas por servicios complementarios cubiertos y precios públicos por prestaciones actualmente no cubiertas.
        4) Modular los copagos en función de criterios clínicos y de coste efectividad con copagos evitables siempre que sea posible.
        5) Implementar mecanismos de protección de los más débiles económicamente y los más enfermos.         Esto podría consistir en la fijación de un límite máximo de contribución al trimestre o al
año en función de la renta familiar, con exención total de las rentas más bajas, ya sean procedentes del trabajo o la pensión, y tratamiento especial de los casos de enfermedad crónica o multipatología.
El copago y otras formas de contribución no deben empobrecer, por lo cual el límite debería suponer un porcentaje reducido de la renta familiar

jueves, 2 de febrero de 2012

Echarse un Amante

- Este relato , de Jorge Bucay , me ha venido a la memoria tras ver en la consulta a algunas personas  a las que algún colega que pasa la consulta con prisas  y sin tiempo para hablar con los pacientes (mal endémico en el Sistema de salud), les había prescrito antidepresivos  y ellos no querían tomarlos. Es frecuente confundir la tristeza normal por una pérdida con la depresión ,que es una tristeza patológica, desproporcionada . ¡Ah, si tuviéramos tiempo en la consulta para comunicarnos bién con los que acuden a la consulta!:

" Muchas personas tienen un amante y otras quisieran tenerlo. Y también están las que no lo tienen, o las que lo tenían y lo perdieron. Y son generalmente estas dos últimas, las que vienen a mi consultorio para decirme que están tristes o que tienen distintos síntomas, como insomnio, falta de voluntad, pesimismo, crisis de llanto o los más diversos dolores.

Me cuentan que sus vidas transcurren de manera monótona y sin expectativas, que trabajan nada más que para subsistir y, que no saben en que ocupar su tiempo libre.




Antes de contarme esto ya habían visitado otros consultorios en los que recibieron la condolencia de un diagnóstico seguro: “Depresión” y la infaltable receta del antidepresivo de turno. Si yo he llegado a conocer a estas personas es, porque obviamente, no mejoraron y vinieron a verme buscando soluciones a su rosario de dolencias.

Entonces, después de que las escucho atentamente, les digo que no necesitan un antidepresivo: ¡que lo que realmente necesitan es un amante!



Es increíble ver la expresión de sus ojos cuando reciben mi veredicto. Están las que piensan: “¡¡Cómo es posible que un profesional se despache alegremente con una sugerencia tan poco científica!!” Y también están las que, escandalizadas, se despiden y no vuelven nunca mas.
A las que deciden quedarse y no salen espantadas por el consejo, les doy la siguiente definición:
Amante es: “Lo que nos apasiona”. Lo que ocupa nuestro pensamiento antes de quedarnos dormidos y es también quien a veces, no nos deja dormir. Nuestro amante es lo que nos vuelve distraídos frente al entorno. Lo que nos deja saber que la vida tiene motivación y sentido. A veces a nuestro amante lo encontramos en nuestra pareja, en otros casos en alguien que no es nuestra pareja. También solemos hallarlo en la investigación científica, en la literatura, en la música, en la política, en el deporte, en el trabajo, cuando es vocacional, en la necesidad de trascender espiritualmente, en la amistad, en la buena mesa, en el estudio o en el obsesivo placer de un hobby....En fin, es “alguien” o “algo” que nos pone de “novio con la vida” y nos aparta del triste destino de durar.
¿Y qué es durar? – Durar... ... ... ... es tener miedo a vivir.
Aprendamos a vivir y dejemos de sobrevivir."

 

miércoles, 1 de febrero de 2012

La MInistra defiende la libre elección de médico . Más de lo mismo

- Hoy hemos comido con el Notición del día: LA Ministra Ana Mato dice que habrá libre elección de Médico y Pediatra, para dar cumplimiento a la ley 41 /2002 de Autonomía del paciente.






    Creíamos que lo habíamos visto casi todo con Leyre Pajín y después de tanto ruido aparecen estas nueces. Entonces Sra Ministra :
    ¿ Cómo van a elegir médico en los centros rurales en los que sólo hay un médico ? Esto ocurre  en todos los pueblos  de España ,de menos de 1500 habitantes  que yo sepa. ¿O es que van a poder elegir a un médico de Barcelona los habitantes de un pueblo de Jaén?
    ¿Entonces , si en un pueblo ó en un centro hay dos médicos y uno es "percibido"  como mejor que otro, qué harán : asignarle al "bueno" 3000 cartillas y al "menos bueno" 300 sólamente, por decir algo?
_  Y en los Centros urbanos, "premiarán" a los médicos más competentes   , siempre según  la población,  con un cupo asfixiante que le obligue a trabajar aún más y en condiciones como las actuales de un paciente cada cinco minutos? ¿Y sin lista de espera, verdad?
Esta monserga, Sra Ministra, ya nos la conocemos y es sencillamente una forma más de demagogia , que no tiene  en cuenta que diciendo esas ocurrencias, se penaliza a los médicos que más se entregan y más se implican con la población , y se puede penalizar asímismo a un médico competente simplemente porque sea más serio ó menos simpático y menos complaciente  que otros que suplen sus carencias formativas con la charlatanería , la sonrisa permanente  y la aquiescencia para todo. ¿Ó acaso ignora Vd  y sus asesores que hay  muchos pacientes manipuladores, que quieren bajas innecesarias, fármacos que no están indicados para su problema, ó que solicitan se les pasen las medicinas de otro médico privado  al que han acudido porque su médico asignado no ha accedido a una derivación innecesaria?
  Sepa que los médicos más quemados, son los que ceden a todo lo que pide el paciente para no dejarse más piel emocional en cada contacto asistencial.  Además , con lo que pagan por cada  cartilla, unos 40 céntimos más ó menos, se le otorga al paciente el derecho a acudir a las  consultas ó a las urgencias todos los días y horas del año GRATIS TOTAL.
 Y con estas decisiones ,  más las que ya estamos sufriendo en nuestros sueldos  e impuestos,la proporción de médicos  con  Burn-out crecerá exponencialmente .
   - ¿Porqué no se atreve ningún político a valorar el copago modulado según los niveles de renta, ó el quitar de la financiación  los fármacos  para autocuidados que valen menos de 2ó tres euros?

Como dice J. Ramón Repullo al respecto en éste artículo:
Si no hay decisiones organizativas y asignativas, este sistema de libérrima elección de hospital, servicio y médico, lleva en la práctica a que la Consejería de Sanidad desintegre su acción sobre oferta y demanda: por una parte, podrá seguir haciendo inversiones y asignación presupuestaria de acuerdo a sus propias preferencias (por lo tanto, el crecimiento o abandono de los centros y servicios dependerá en buena medida del juego cortesano y de las amistades peligrosas); y por otra, dejará que la demanda busque la oferta, y se ajuste en función de la deseabilidad del servicio y de la espera del mismo.

Será la obstinación y estupidez del paciente (como ahora en la lista de espera quirúrgica) la que le ate a su hospital general próximo masificado, en vez de viajar al otro lado de Madrid para que le vean dos meses antes; seguramente también quedará excluido del cómputo de espera de consulta por su propia culpa…



La excusa de la libre elección sirve para abdicar de planificar poblacionalmente, oculta los molestos problemas de accesibilidad, y evita tener que enfrentarse a dilemas de equidad. Qué confortable es abandonarse a la mano invisible, vía racionamiento implícito e invisible. Como decíamos al principio: la Consejería pone los recursos donde le parece, los financia como quiere, y a quien Dios se la dé, San Pedro se la bendiga; Apáñate como puedas, querido paciente y querido médico.


Así que ésta noticia, Sra Ministra, es una mala noticia para médicos y pacientes, que nos podía haber ahorrado. Estamos deseando oir siquiera alguna buena noticia en estos tiempos de tribulación.

martes, 31 de enero de 2012

Psicoterapia en Cinco MInutos

- Casi todos estos días  estamos de mal humor con tantas especulaciones, rumores, bulos .........que no anuncian más que catástrofes en nuestro ámbito de la sanidad  con los ajustes que se cree que van a hacer.  Hablaremos un día de la crispación que produce la falta de información y que ya cansa un poco, por no decir  que puede empezar a dar paso al cabreo y/o a la furia por las medidas absurdas que se rumorea quieren imponer. Por éso me he acordado de éste vídeo que nos dá la solución: simplemente PARALO, NO HAGAMOS CASO A LOS RUMORES Y ESPEREMOS LOS HECHOS REALES PARA VALORARLOS Y TOMAR DECISIONES. Y , en cualquier caso , no perdamos de vista  el humor, es necesario para valorar todo con la debida distancia:

lunes, 30 de enero de 2012

La Sociedad Saciada

- Pedro Cavadas, el prestigioso  Cirujano  español ,  que realizó el primer transplante de cara en España, descubrió el  sentido de la vida y la esencia de ser médico , a la vuelta de un viaje a Kenia con el fin de ayudar a algunos . De ese viaje volvió otro Pedro Cavadas. Uno más consciente y comprometido. La muerte de uno de sus hermanos en un accidente de tráfico fue la desgracia que terminó de “abrirle los ojos” y le ayudó a ver más allá de sus cuentas bancarias. “Nadie ha pagado una entrada más cara por nacer en el hemisferio Norte”, ha dicho alguna vez el doctor.

A raíz de estos acontecimientos fue incapaz de volver a conducir su Porsche, ni ninguno de sus otros vehículos de coleccionista. Tanto él como el resto de su familia vendieron sus coches de lujo y se metieron de lleno en un proyecto de ayuda para África. De ahí nació la fundación Pedro Cavadas, que se nutre económicamente en un 99 % de las operaciones privadas del doctor y del estudio de los arquitectos Virginia y Eduardo Cavadas; tan sólo el uno por ciento restante corresponde a donativos.
Este extraordinario colega, da brillo continuamente a la  quintaesencia de la profesión, y es capaz de albergar en su propia casa y la de sus familiares a los niños que él mismo se trae para operarles, mientras se recuperan.


Una de las reflexiones que hace es la siguiente:
 "En las zonas duras del planeta, la gente no está de mala hostia todo el día. Al revés, lo pasan mal, pero los ratitos en que no lo pasan mal están alegres. Bailan, cantan. ¿Cómo es esto posible? En Occidente lo tenemos casi todo, o eso nos hacen creer, y estamos de mala leche todo el tiempo".

"Es la cirugía de las sociedades saciadas. Cuando alguien está saciado, tiene más comida de la que puede comer, más música de la que puede oír, más placer del que puede experimentar, entonces se empieza a preocupar por la puntita de la nariz o el michelín. Cuando la gente tiene vidas duras, y la mayoría de la humanidad las tiene, no se preocupa de eso. Y no es tan infeliz. AL REVÉS."

sábado, 28 de enero de 2012

No lo olvides

- En la película Invictus, el extraordinario presidente Nelson Mandela nos recuerda este poema , lleno de claves para afrontar tiempos como éstos, donde los derrotistas y los "colaboracionistas" siguen pensando sólo en ellos. Tomemos nota y tengámoslo siempre presente: es una buena forma de salir airosos de esta situación que amenaza más nuestros principios que nuestro futuro:





Invictus

Más allá de la noche que me cubre
negra como el abismo insondable,
doy gracias a los dioses que pudieran existir
por mi alma invicta.
En las azarosas garras de las circunstancias
nunca me he lamentado ni he pestañeado.
Sometido a los golpes del destino
mi cabeza está ensangrentada, pero erguida.
Más allá de este lugar de cólera y lágrimas
donde yace el Horror de la Sombra,
la amenaza de los años
me encuentra, y me encontrará, sin miedo.
No importa cuán estrecho sea el portal,
cuán cargada de castigos la sentencia,
soy el amo de mi destino:
soy el capitán de mi alma.


William Ernest Henley.